Si has notado que tu gato tiene dificultades para caminar sobre sus patas traseras, es importante que estés atento. Cuando tu gato arrastra las patas traseras, puede parecer una situación banal que no supone ningún riesgo para la salud de tu felino, pero lo cierto es que se trata de un tipo de parálisis en gatos que puede ser bastante perjudicial para tu minino. Para entender mejor en qué consiste esta afección,cuáles son los riesgos, los síntomas y el tratamiento más adecuado, la Patas en casa entrevistó a la veterinaria Erica Baffa, especializada en medicina felina. Vea a continuación las aclaraciones de la experta.

House Paws: ¿qué es y cuáles son los riesgos de la parálisis repentina de las patas traseras en los gatos?

Erica Baffa: La parálisis súbita es un estado o situación de inmovilidad, que puede ser parcial o total, que compromete temporal o permanentemente la función motora del paciente felino y que pone en riesgo la vida del animal en los casos más graves -dependiendo, sobre todo, de las posibles causas, que son variadas-. La afección puede estar causada por tromboembolismo secundario a cardiomiopatía hipertrófica, linfomaslesión medular (puede o no ser inducida por el FeLV) e incluso traumatismo medular con lesión medular.

Este tipo de parálisis en los gatos puede dar lugar a diversas disfunciones orgánicas cuando las distintas inervaciones se ven comprometidas, ya que algunos gatos pueden dejar de ser capaces de orinar por sí mismos, necesitando que alguien les ayude a descomprimir la vejiga. Este factor de retención de orina conlleva la posibilidad de infección urinaria que empeora el estado del paciente. Otros gatos pueden presentar abrasionesy úlceras cutáneas debidas a la fricción directa o al contacto con el suelo, y en algunas circunstancias puede producirse necrosis cutánea cuando hay compromiso circulatorio. También puede producirse atrofia muscular.

Aunque algunas de estas limitaciones pueden aparecer de forma concurrente o aislada, algunos gatos con parálisis pueden adaptarse bien a los cambios si la causa no es progresiva y tienen posibilidades de una buena supervivencia.

Que un gato tenga dificultades para caminar sobre sus patas traseras, ¿es siempre un signo de parálisis repentina?

E.B: Como su nombre indica, la parálisis súbita puede ocurrir de repente. En la gran mayoría de los casos, debemos estar atentos a posibilidades más graves de parálisis súbita, como un tromboembolismo aórtico secundario a una cardiomiopatía hipertrófica. Otra causa sería un linfoma medular, especialmente en gatos positivos al FeLV. Algunos gatos pueden, por ejemplo, tener una compresión neural que la provoqueEstos pacientes mostrarán signos más sutiles, que a menudo pueden pasar desapercibidos a los cuidadores, mientras que otros pueden sufrir un traumatismo vertebral y dejar de caminar.

¿Qué otros síntomas pueden observarse en el gato con parálisis de las patas traseras?

E. B: Los síntomas dependen de la causa subyacente. Cuando la causa es un tromboembolismo aórtico secundario a una miocardiopatía hipertrófica, por ejemplo, los síntomas más comunes incluyen una fuerte vocalización debida a un intenso dolor agudo, seguida de vómitos, respiración rápida, dificultad para respirar, tos, pérdida de apetito y abatimiento. Estos gatos suelen desarrollar parálisis en las patas traseras, pérdida de tonofemoral y una disminución de la temperatura en las extremidades posteriores debido a un tromboembolismo que compromete toda la circulación sanguínea. Puede producirse un síncope o la muerte súbita del animal. Si la causa es una lesión medular, puede aparecer una sensibilidad dolorosa.

¿Existe tratamiento para el gato que sufre una parálisis repentina de la extremidad posterior?

E. B: Existe tratamiento y varía según la causa principal. El tratamiento para el tromboembolismo es la cirugía vascular inmediata - generalmente cuando se hace el diagnóstico, el procedimiento quirúrgico se realiza dentro de las 6 horas del evento y existe la posibilidad de que el paciente vuelva a caminar. El diagnóstico en este caso se hace generalmente basado en el análisis clínico del animal y encontrando eltrombo, que a menudo puede verse con ecografía. Recuerde que debe realizarse una ecocardiografía para valorar si hay más trombos o no. También pueden administrarse medicamentos que impidan la formación de coágulos, además de analgésicos.

¿Cómo se puede prevenir una parálisis repentina de la extremidad posterior?

E.B: La prevención es posible realizando lo que llamamos medicina preventiva y chequeo del paciente felino. El gato debe ser llevado al veterinario para una inspección rutinaria y un examen físico, clínico y de laboratorio. Son indispensables las pruebas de imagen que permiten evaluar las afecciones cardiacas, como el ecocardiograma y el electrocardiograma, así como los análisis de sangre.Cuando somos capaces de diagnosticar precozmente, es posible tratar adecuadamente y prolongar la vida del paciente siempre con amor y respeto por la vida de los gatitos.