El embarazo en una perra es una etapa mágica y llena de cambios, tanto en la vida de la cachorra como en la de los humanos que conviven con ella. Es importante preparar la casa para recibir a los cachorros, así como llevar a cabo cuidados prenatales para asegurarse de que todo va bien con la salud de la madre y de los bebés. El problema es que, en algunos casos, puede aparecer depresión posparto en perras.se convierte en un obstáculo tras el nacimiento de los cachorros, y a menudo el tutor no sabe cómo afrontar este tipo de situación (o ni siquiera sabe que existe el trastorno). Patas en casa habló con la veterinaria Renata Bloomfield, especializada en comportamiento animal, para aclarar las principales dudas sobre el tema.

¿Tiene un perro depresión posparto o no?

Sí, la depresión posparto puede aparecer tras el embarazo canino. Entre las principales causas del problema, destacan los cambios hormonales que sufre la perra durante este periodo. "Hay una serie de hormonas que ayudan a mantener el embarazo canino. Tras el parto, se produce un descenso muy brusco en la producción de estas hormonas, por lo que es habitual que se produzca un cambio en el estado de ánimo.Sin embargo, las perras con déficit de alguna de estas hormonas acaban sufriendo depresión posparto", explica Renata.

Hay otras razones por las que esto puede ocurrir: a veces, simplemente, la perra aún no se ha acostumbrado a la presencia de los cachorros, por lo que acaba rechazándolos. "La perra asocia los cachorros con el dolor, lo que provoca rechazo. Además, una parte de la lactancia no es muy cómoda, lo que contribuye a este comportamiento", explica la experta. El entorno en el que la perra se come a los cachorros no es muy cómodo.La depresión postnatal también es una gran diferencia, porque tiene que ser un lugar tranquilo y apacible.

Perra con depresión posparto: ¿cómo identificar el problema?

Tras el embarazo de la perra, es importante vigilar el comportamiento del animal. Una de las principales señales de que la perra sufre depresión posparto es cuando rechaza a los cachorros, pero también hay otros factores a los que hay que prestar atención. "Si la perra no quiere comer y no quiere interactuar con las personas de la familia, es importante vigilarla. Conviene recordar que la depresión no essólo cuando el perro está muy tranquilo, la agresividad también puede indicar un problema".

Siempre es bueno tener un parámetro para saber identificar cuándo la perra necesita ayuda o no. Entonces, ¿cuál es el comportamiento "ideal" de una perra en estas circunstancias? Renata lo explica: "Al final de la gestación canina y próxima al parto, la hembra suele empezar a buscar un lugar para tener a los cachorros. Es algo natural y esperable en su comportamiento. Cuando empiezan las contracciones, ellatambién empieza a lamerse mucho, y en cuanto sale el cachorro junto con la placenta, la perra lame al bebé. En otras palabras, se trata de una perra preocupada por dónde acabará y que no deja de cuidar al cachorro, aunque siga de parto, ya que suele nacer más de un cachorro. Tras el embarazo de la perra, también es natural que coloque a los cachorros cerca de los pies del bebé.lactancia y permanece siempre cerca de ellos, manteniendo además un comportamiento dócil con la familia".

¿Necesita atención médica una perra con depresión posparto?

Independientemente de que haya embarazo o no, es fundamental tener una serie de cuidados con la perra. El embarazo suele ser más complicado, ya que provoca muchos cambios hormonales, por lo que, tal y como aconseja el veterinario, los cuidados prenatales son fundamentales para ayudar a la perra en este delicado momento. Cuando la perra presenta síntomas de depresión postparto, es importante saber cómo llevar a cabo el tratamiento.Los cambios muy drásticos de comportamiento a veces requieren una evaluación clínica, como cuando el animal no quiere comer o se pone muy enfurruñado.

Sin embargo, en algunos casos es posible revertir la situación con simples cuidados cotidianos: "La perra necesita un entorno tranquilo. Necesita que la respeten y que respeten a los cachorros. Si no quiere que nadie se acerque a sus hijos, es importante darle ese espacio. Si no quiere mamar, el tutor debe introducir a los cachorros y transformar el momento de la lactancia.amamantamiento en algo tranquilo, sosegado y acogedor para esa madre".

Aun así, no se puede descartar la posibilidad de un tratamiento, que varía mucho de un caso a otro. Además de la depresión posparto en perras, un problema que se suele confundir con este tipo de trastorno es cuando no nacen todos los cachorros. "El cachorro se queda dentro de la hembra porque no hubo cuidados prenatales, y esto acaba infectando el útero de la madre. La perra en estos casos se vuelve huraña,no quiere comer y empieza a sentir mucho dolor, por lo que es importante que el perro sea evaluado por un veterinario si se observa algún cambio en su comportamiento".

El apoyo familiar es muy importante para prevenir la depresión posparto en las perras

Hay varias razones por las que una perra puede sufrir depresión posparto. En algunos casos, los cambios endocrinos son los responsables, pero tampoco podemos dejar de ignorar cuando la razón viene de dentro del hogar. "Esta afección puede afectar a perras que no tienen un entorno seguro, por lo que pueden acabar rechazando de alguna manera a los cachorros y volverse más agresivas". Confianza en la familia y en la perra.La comodidad que el perro tiene en el entorno es muy importante, y también lo es la comodidad que el perro tiene a lo largo de su vida, lo que hace que el animal esté más seguro para enfrentarse a este tipo de situaciones", destaca Renata.