Dar variedad en el menú canino es súper válido, pero saber qué frutas puede comer el perro es algo necesario en estas ocasiones. Al fin y al cabo, no querrás ofrecer nada que perjudique la salud de tu amigo de cuatro patas, ¿verdad? Pues bien, algunas opciones liberadas son el plátano, el mango, el kiwi, la sandía... pero ¿y la fresa? Se la puedes dar a los perros o no? Para responder a esta pregunta, el Patas en casa ha preparado un artículo con todo lo que necesitas saber sobre este alimento, sus beneficios y la mejor forma de ofrecérselo a tu cachorro ¡Acompáñanos!

Después de todo, ¿pueden los perros comer fresas?

Si esta es tu duda, puedes estar tranquilo, cuando se trata de fresas, ¡el perro puede comerlas sin problemas! Esta es una de las frutas liberadas para perros y que incluso puede ser beneficiosa para la salud canina, pero que requiere cierta moderación en su consumo (al igual que cualquier otro alimento que no forme parte de la dieta del animal). Esto se debe a que, a pesar de tener sus ventajas, cuando el perro comedemasiada fresa, corres el riesgo de desarrollar problemas como la diabetes y la obesidad.

Si su perro ya padece alguna de estas afecciones, debe hablar con un veterinario antes de incluir la fruta en el menú de su amigo. Si su perro goza de buena salud, puede comer fresas ocasionalmente como golosina.

Conozca los beneficios de las fresas para los perros

Al igual que para nosotros, la fresa para perros también tiene sus beneficios. Por ser rica en vitaminas A, B y C y en varios minerales, es una fruta que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico del animal y también actúa como antiinflamatorio. Compruebe a continuación cuáles son sus principales beneficios:

• Vitamina A: favorece la visión canina, la salud de la piel y la inmunidad;
• Vitamina B: tiene acción antioxidante y mejora las funciones del sistema nervioso del perro;
• Vitamina C: refuerza el sistema inmunitario y actúa como antioxidante;
• Minerales: Otros nutrientes presentes en las fresas son el calcio, el potasio, el hierro, el selenio y el magnesio, que actúan en distintas funciones del organismo canino.

Las fresas se pueden dar a los perros con algunas precauciones.

Los perros pueden comer fresas siempre que se sigan ciertas precauciones. A diferencia de la mayoría de las frutas, no es necesario quitar las semillas de las fresas para perros. Las semillas, además de ser comestibles e inocuas para la salud canina, también son una fuente de fibra y ayudan a mejorar el tránsito intestinal de la mascota. Por otro lado, siempre es válido cortar la fresa en trozos pequeños para queno arriesgarse a que un perro se atragante con su comida.

Ah, y aquí va un valioso consejo: si es la primera vez que se ofrece la fresa al perro, es fundamental observar la reacción del animal al principio. Algunos perros tienen hipersensibilidad a la fruta y no pueden digerirla, por lo que no pueden comer fresas. Además, también hay que evitar los excesos, ya que aumentan los niveles de azúcar en sangre del animal y, por tanto, los del perro.el alto contenido en fibra de las semillas puede provocar diarrea en los perros.

Finalmente, la última precaución es que aunque existen varias recetas con fresas, es importante que la fruta sea proporcionada in natura para que tu cachorro la consuma. Recuerda que existen muchos alimentos que están prohibidos para los perros por ser dañinos e incluso tóxicos para estos animales, por lo que la mejor alternativa es la fruta natural.