Si has adoptado o rescatado a un gatito felino, seguro que tienes dudas sobre cómo alimentarlo. Al fin y al cabo, el recién nacido tiene una salud súper delicada que necesita unos cuidados muy especiales. Además de mantenerlo calentito y protegido, los cuidadores también deben prestar atención a la alimentación del pequeño, optando siempre por la lactancia natural de la propia madre felina al bebé. PeroEn casos de abandono o problemas de salud de la madre, a menudo no es posible crear este vínculo. Como solución, los tutores pueden optar por el uso de leche artificial para mantener al gatito alimentado y en pleno desarrollo.

¿Cuándo elegir leche artificial para gatos?

En todos los casos en los que el gatito no pueda tener contacto con la lactancia felina, la leche artificial será la recomendación veterinaria. En estos momentos, muchos tutores buscan otras soluciones, como una leche casera para gatos recién nacidos. Sin embargo, incluso las recetas caseras deben ser prescritas por un veterinario, que comprobará la ingesta de nutrientes necesaria para el pequeño peludo. De hecho, laLo ideal es que el tutor busque una nodriza para el gatito en ONG o centros de rescate y nunca opte por ofrecerle leche de vaca, la que se vende en los supermercados. La leche común que consumimos puede provocar diarreas y otras molestias en el pequeño peludo.

La leche artificial para gatos es una opción en el mercado de animales de compañía hecha para satisfacer las necesidades nutricionales del gatito. Es un sustituto de la leche materna y ofrecerá y los nutrientes y vitaminas necesarios para el desarrollo saludable del gatito. Fácil de preparar, por lo general es suficiente para diluir un polvo en agua fría o tibia. El control veterinario es necesario para la mejor orientación sobre cómo preparar la leche.alimente a su gatito y evalúe sus necesidades nutricionales en todas las etapas.

Cómo alimentar a un gatito: sustituir a la madre felina es todo un reto

A la hora de alimentar a los gatitos abandonados, la cantidad diaria de leche de fórmula, por ejemplo, debe consultarse con un veterinario. En general, los gatitos consumen hasta 30 ml de leche de fórmula cada tres horas. En otras palabras: los gatitos necesitan alimentarse 4 veces al día. Para suplir la ausencia de la madre, el tutor puede ofrecer un biberón, que debe ser adecuado para los gatitosA falta de uno, una jeringuilla puede ayudar, pero es más saludable hacerlo con el recipiente adecuado: el biberón suele ser pequeño y tiene indicadores en el exterior para ilustrar la cantidad. Además, tienen un pequeño orificio en la boquilla para animar al gatito a chupar.

La forma correcta de alimentar a un gatito con leche es bastante sencilla, pero debes tener cuidado. Te aconsejamos que prepares la leche artificial tal y como indica el fabricante y le ofrezcas el líquido a una temperatura de entre 37 °C y 39 °C. En ningún caso aprietes el biberón, ya que el propio gatito ya está chupando el líquido. Cuando te des cuenta de que el gatito puede atragantarse, deja de hacerlo y vuelve a ofrecérselo cuando se haya atragantado.Así se evita el ahogamiento, que puede provocar la muerte.

Cómo alimentar a un gatito recién nacido

En el caso de los guardianes que buscan cómo alimentar a un gatito recién nacido y abandonado, los cuidados deben redoblarse. Los cuidados del gato recién nacido y las instrucciones sobre cómo alimentar a un gatito rechazado requieren más delicadeza y cariño: abrigar muy bien al pequeño con mantas y ofrecerle la leche con todo el celo. Así se evitará que el recién nacido siga sufriendo.La transición a otros alimentos suele comenzar a partir del segundo mes de vida y también es preferible la mediación de un veterinario, que indicará las mejores fuentes de alimentación, ya sea con sobres, pienso o la propia comida del gato.

Cómo alimentar a un gatito puede convertirse en una necesidad

Hay muchos factores que pueden impedir la lactancia. Por ejemplo, una gata puede tener seis mamas y nacer una camada de ocho gatitos. En situaciones así, algunos gatitos no tendrán cubiertas sus necesidades nutricionales. En otros casos, la madre puede no ser capaz de amamantar debido al desarrollo de problemas de salud que provoquen el rechazo del gatito.

Generalmente puede tener enfermedades como Metritis o Mastitis en gatas, ambas son afecciones inflamatorias que imposibilitan el amamantamiento, provocando dolor en la zona de las mamas de la gata. Se pueden prevenir con un parto realizado en buenas condiciones higiénicas. En casos más graves de Mastitis, en los que la causa es bacteriana, es necesario acudir al veterinario para evitar un empeoramiento.La Eclampsia felina tambiénpuede afectar a la madre y se produce cuando la gata mama y luego no puede reponer su pérdida de calcio. Esta enfermedad se produce en las primeras semanas del posparto y se nota en el comportamiento de la gata madre, que mostrará malestar y debilidad constantes. En estas condiciones, es posible que la gata no pueda dar leche al gatito.

De mamá a bebé: importancia de la leche materna para el gatito

Al igual que con los humanos, la gata lactante crea y refuerza el vínculo afectivo con el gatito. Este vínculo afectivo es extremadamente importante e influirá en el comportamiento del gatito recién nacido durante toda su vida. Sin embargo, puede ocurrir que la gata no pueda establecer este vínculo, ya sea por rechazo, salud, muerte tras el nacimiento o separación de su camada. Pero, en condicionesnormal, es esencial que la lactancia felina se produzca durante al menos las cuatro primeras semanas de vida del gatito.

Las madres felinas también producen calostro, conocido como la primera leche que una madre produce para su hijo. Rico en diversos nutrientes, es importante en las primeras tomas porque es a partir del calostro que el gatito recibe anticuerpos (inmunoglobulinas) que reforzarán su sistema inmunitario y prepararán las defensas de su organismo contra las infecciones. Además de los gatitos, si es posible, también hay que dar calostro a las gatas.Los guardianes también deben preocuparse por la salud de la madre. En este momento es bueno invertir en abundante agua y buena comida para que pueda recuperarse y amamantar sanamente. Más adelante, se recomienda la castración para evitar nuevas crías.