Los vómitos del gato no son una situación muy infrecuente. Aunque suelen estar relacionados con la eliminación de las bolas de pelo, es importante vigilar la frecuencia y el aspecto de los vómitos del gato, ya que son un síntoma común de algunos problemas de salud. Si el gato vomita espuma o croquetas amarillas o blancas, es probable que tenga algún desequilibrio en el organismo que hay que investigar.Si el vómito incluye sangre o heces, la atención debe ser inmediata. Enfermedades como el linfoma, la insuficiencia renal y la diabetes son algunas de las complicaciones de salud que pueden señalarse con el vómito del gato. Patas de Casa ha preparado una guía con todo lo que necesitas saber sobre el vómito del gato!

"Mi gato vomita": observar el aspecto del vómito es esencial

Para identificar qué significa el vómito del gato, hay que fijarse bien en el aspecto del contenido que ha salido de su boca. Si se trata de la eliminación de una bola de pelo, no será difícil identificar los pelos enmarañados junto con un líquido amarillo. Pero otros aspectos y coloraciones pueden estar asociados a una causa diferente. Además, es importante prestar atención al momento en que el gato vomita,para saber si el vómito se produce después de una comida o de haber tomado algún medicamento, por ejemplo. Las características más comunes del vómito del gato son:

• Vómito amarillo Vómitos amarillos del gato : por lo general, los vómitos amarillos del gato indican que el estómago del animal está vacío y la única sustancia que queda por expulsar es el líquido biliar. Los problemas de gastritis también pueden estar asociados a los vómitos amarillos del gato, que suelen aparecer tras episodios frecuentes de vómitos de color marrón.

• Espuma blanca Que el gato vomite espuma blanca puede indicar alguna irritación en el aparato digestivo. La frecuencia de este tipo de vómitos debe ser observada por el cuidador. Si se produce de forma recurrente, lo ideal es buscar la ayuda de un profesional para que revise el caso de su mascota, ya que existen varias posibilidades asociadas a este tipo de vómitos del gato.

• Vómito marrón En casos graves, la coloración marrón puede indicar la presencia de parásitos, linfomas alimentarios, gastritis y complicaciones en el sistema gastrointestinal. Sin embargo, este tipo de vómitos también puede asociarse a algo menos grave, como los casos de gatos que vomitan comida. En este caso, es posible identificar los granos que han sido mal digeridos.

• Vómito rojo El color rojo se asocia a problemas de coagulación, tumores, ascárides, tenias y otros problemas. Un gato que vomita sangre debe ser examinado urgentemente por un veterinario, ya que puede tratarse de un caso más grave.
  Ver también: Acné felino: cómo eliminar el acné del gato en casa
• Vómito con heces Los vómitos del gato con heces pueden estar causados por algún tipo de obstrucción en el estómago.

Vómitos de gato: ¿qué puede ser?

Aunque el aspecto del vómito puede indicar la gravedad del problema, hay varias enfermedades que pueden asociarse a la misma característica del vómito del gato. Por ejemplo, el hecho de que el gato vomite comida no suele suponer una amenaza importante para la salud del animal. Sin embargo, la regurgitación también puede indicar malformación del canal esofágico, alergia a los alimentos o ingestión de un objeto extraño.Las enfermedades y afecciones más comunes asociadas a los vómitos de los gatos son:

• insuficiencia renal
• envenenamiento
• pancreatitis
• diabetes
• lipidosis hepática felina
• enfermedad inflamatoria intestinal felina
• alergia alimentaria
• tumores

Vómitos del gato: ¿qué hacer?

Es necesario que los guardianes mantengan la calma cuando su gato vomita. Tras analizar el aspecto del vómito, es importante observar el comportamiento del gato tras enfermar. Es normal y esperable que el felino esté más tranquilo y muestre cansancio tras el suceso. Aun así, lo mejor es retirar el agua y la comida de la mascota para que no vuelva a vomitar. La ingestión de agua o comida debeEl felino tampoco debe deshidratarse, porque el vómito le hace perder ciertos nutrientes y alimento.

Si el gato no muestra ningún cambio de comportamiento, puede que sólo se trate de un vómito aislado. En cualquier caso, mantener al día la revisión de tu gatito es la mejor manera de prevenir enfermedades y realizar diagnósticos precoces.

¿Cómo tratar al gato que vomita bolas de pelo?

Los gatos son extremadamente higiénicos y se limpian con la lengua, lo que puede dar lugar a la eliminación de bolas de pelo. También llamadas tricobezoares, las bolas de pelo se forman en el estómago a medida que la lengua áspera del gato elimina el polvo y el pelo suelto. En el caso de los gatos de pelo largo, es habitual que la eliminación oral se produzca al menos una vez a la semana, sobre todo por la mañana.El único problema es cuando estas bolas no pueden eliminarse y acaban atascándose en los intestinos del animal, lo que puede provocar dolor abdominal, diarrea o heces secas, falta de apetito, apatía y vómitos. La mejor forma de prevenir las bolas de pelo es cepillar al gato con frecuencia para eliminar el pelo muerto. La dieta del gato también puede ayudar: un alimento rico en bolas de pelo puede ayudar.La fibra ayuda a facilitar el tránsito del pelo por el sistema digestivo de la mascota.

Vómitos frecuentes del gato: el tratamiento depende de la causa del problema

Si su gato vomita con frecuencia, es necesario que el propietario acuda a un profesional. Esto es esencial para averiguar el origen del problema y realizar el tratamiento adecuado. Los remedios caseros suelen acabar retrasando la mejoría. En casos graves, pueden estar indicados antibióticos y otros medicamentos, dependiendo de la causa. El diagnóstico preciso sólo puede realizarlo el veterinario.En general, evitar alimentos grasos y azucarados en la dieta del felino es algo que se puede adoptar para evitar el caso de un gato que vomita. Si además de vomitar el felino presenta otros síntomas, el guardián debe preocuparse un poco más. Diarrea, distensión abdominal, fiebre, signos de depresión felina, encías pálidas o amarillentas son algunos de los signos que deben hacer que el guardián esté alerta ante condiciones más graves.