La idea de adiestrar gatos no es tan común como la de adiestrar perros porque siempre imaginamos a los mininos como animales más libres e independientes. Sin embargo, los peludos también pueden mostrar ciertos comportamientos inadecuados que se corrigen con adiestramiento. Uno de ellos es subirse a la mesa. A algunos guardianes no les importa, pero otros no aprueban este comportamiento porque, además de ensuciar los muebles(Saber educar a un gato que se sube a la mesa evita que se haga daño con cuchillos, platos y macetas, objetos que suelen dejarse encima de los muebles.

Es en la mesa donde suele reunirse la familia y es natural que el gatito quiera subirse para estar juntos, sobre todo si hay comida que le gusta picar. Además, a los gatitos les gustan por naturaleza los lugares altos, por lo que la mesa resulta muy atractiva para el animal. Forma parte del instinto del gato explorar el entorno y subirse a lugares altos. El tutor no puede prohibir este comportamiento de la mascota, ya que esPero, como la mesa no es el lugar más adecuado y seguro para ello, hay que aprender a reconducir este hábito de forma saludable. Comprueba cómo enseñar a tu gato a no subirse a la mesa de forma eficaz!

Paso 1: Crear un entorno que atraiga más al gato que la mesa

Un gran error a la hora de aprender cómo enseñar a los gatos a no subirse a las cosas es pensar que es posible hacer que la mascota no vuelva a tener este comportamiento si no tiene donde subirse. Como ya hemos explicado, los felinos tienen la necesidad de explorar e investigar todos los lugares en los que se encuentran y aquellos que son más altos llaman su atención. Si quieres aprender cómo educar a un gato que se sube a la mesa, el primer paso esDirige tu atención a otro lugar que tiene todo lo que tanto te atrae en la mesa: altura, diversión y comida.

Con el enriquecimiento ambiental, es posible ofrecer un espacio de forma práctica. Invierta en nichos, estanterías, juguetes, comederos interactivos, rascadores, madrigueras... La hierba gatera de la casa es fundamental en el proceso de adiestrar a un gato para que no se suba a las mesas, porque entonces los demás lugares de la casa despertarán su curiosidad y la mascota dejará de lado los muebles.

Paso 2: Para adiestrar a los gatos, hable con firmeza pero sin gritar ni pelearse

La forma de educar a un gato marca la diferencia en el proceso. Al ver al gato subido a la mesa, puede ocurrir que el tutor grite al animal para demostrarle que está mal. Sin embargo, gritar y pelear no es la forma de educar a un gato que se sube a la mesa, ni a ningún otro proceso. Los animales domésticos son sensibles, por lo que los gritos, los empujones y los tonos agresivos no funcionarán,Incluso puede tener el efecto contrario y hacer que el animal esté más estresado, ansioso o desobediente. La mejor forma de adiestrar a los gatos es con calma y firmeza. Cuando vea al gato sobre la mesa, diga no con firmeza -pero sin agresividad-, coja al animal con suavidad y llévelo al lugar que ha preparado para que explore.

Otro error común es animar indirectamente a tu gato a subirse a la mesa. ¿Sabes cuando se sube y le das un poco de comida? Estás asociando ese lugar con algo positivo, porque pensará que cada vez que esté ahí recibirá una golosina. Así que, para aprender a enseñar a los gatos a no subirse a las cosas, tendrás que prescindir de estas golosinas.

Paso 3: La mejor forma de conseguir que su gato deje de subirse a las cosas es animarle a utilizar el entorno de la hierba gatera.

Después de seguir el paso 2 de cómo enseñar a tu gato a no subirse a la mesa, es el momento de hacer que tu mascota perciba el nuevo entorno como algo divertido. Cuando coloques a tu mascota en el lugar habilitado para ella, ofrécele una recompensa. Vale con bocadillos, caricias y juegos. Siempre que el animal esté allí, cuídalo para que se dé cuenta de que es un entorno agradable y que tiene todo lo que necesita para divertirse.Si quiere saber cómo adiestrar a un gato de la forma más eficaz posible, puede estar seguro de que la asociación positiva es la mejor opción. Con tantas golosinas, será mucho más fácil que el animal entienda que el espacio es algo bueno y quiera pasar más tiempo en él, y menos en la mesa.

Paso 4: Hacer de la mesa un entorno aburrido es un valioso consejo sobre cómo educar al gato que se sube a la mesa

Siguiendo el paso 3 de cómo conseguir que su gato deje de subirse a las cosas, ya ha conseguido el objetivo de proporcionarle un entorno más fresco para que explore. Sin embargo, no basta con que su gato vea el nuevo lugar como divertido: es necesario que vea la mesa como un lugar aburrido. Para ello, puede apelar al agudo sentido del olfato de su gato. Ciertos olores, como los cítricos, no son muy agradables para su gato.Por ello, puede dejar una naranja sobre la mesa o aplicar algún producto de limpieza con este olor. Además, evite poner la comida del gato en el comedero de la mesa, ya que el aroma permanecerá allí y la mascota se sentirá tentada de trepar.

Otra forma de educar a un gato que se sube a la mesa es mantener los muebles siempre limpios, sin restos de comida que puedan dejar olores que atraigan a la mascota. Objetos como llaves, cartones y papeles también llaman la atención del minino, por lo que hay que evitar dejarlos a su alcance. Por último, otro consejo para adiestrar a los gatos es forrar la mesa con algún tejido con el que el felino no se sienta muy cómodo, como plástico o incluso una tela.cinta adhesiva de doble cara en los bordes.

Paso 5: Sincronizar los horarios de las comidas con el animal facilita el proceso de cómo enseñar a los gatos a no subirse a las cosas

Uno de los motivos que más llevan al gatito a subirse a la mesa es la comida. Al oler tu almuerzo, seguro que la mascota te sigue e intenta arrebatarte un trozo. Por eso, un consejo sobre cómo enseñar a un gato a no subirse a la mesa es sincronizar el horario de comidas del guardián y del animal. Justo antes de llevar tu plato a la mesa, llena el cuenco de comida. Así, la mascota empezará a comer su propia comida.Si el gatito sigue intentando trepar, puedes estar seguro de que el motivo es que es muy curioso, así que llévalo al rincón específico para él, muéstrale juguetes y haz que ocupe su atención con otras cosas.