En lo que se refiere a la esterilización del gato, existe una opinión prácticamente unánime entre los veterinarios de que es una cirugía que toda mascota necesita hacer. Además de hacer que el felino sea menos agresivo y evitar el nacimiento de crías no deseadas, la esterilización contribuye a la salud del animal, reduciendo las posibilidades de que desarrolle algunas enfermedades. Es posible esterilizar al gato en clínicas privadas e incluso en domicilios particulares.Muchas universidades veterinarias también ofrecen el servicio de forma gratuita o por un precio inferior. Para saber a los cuántos meses se puede esterilizar a un gato y otras preguntas, hemos separado algunas explicaciones ¡Vea!

¿A qué edad se puede esterilizar a un gato?

No hay consenso sobre la edad adecuada para castrar a un gato, pero se recomienda que la castración de una gata, por ejemplo, tenga lugar entre su primer y segundo celo. La castración de un gato macho está indicada después de su primer año de vida. Las posibilidades de que un gato adoptado de un refugio ya esté castrado son grandes, porque esta cirugía también contribuye al control de la población de animales de la calle. Un gatoUn gato macho adulto y sano puede aparearse durante cuatro o cinco días consecutivos, por lo que es importante esterilizarlo lo antes posible. Aun así, si ha adoptado un gato bebé o lo ha rescatado de la calle, es importante llevarlo al veterinario para confirmar que la cirugía es recomendable.

Saber cuándo se puede castrar a un gato es sólo un detalle, porque en cualquier caso el felino necesitará someterse a una serie de pruebas antes de la castración, como hemograma completo y electrocardiograma. Además, la mascota también debe cumplir algunas obligaciones preoperatorias, como ayunar seis horas de agua y 12 horas de comida. El postoperatorio también requiere atención, porquemuchas mascotas, además de estar somnolientas, pueden experimentar náuseas y falta de apetito.

Esterilización y castración de gatos: ¿hay alguna diferencia?

Sí, hay una diferencia entre la castración del gato y la castración de la gata. Pero antes de explicar sus particularidades, vale la pena decir que esta cirugía mejorará la calidad de vida del gato en un contexto general, independientemente de si es macho o hembra. En los gatos, la castración se realiza mediante la eliminación de los testículos, en el escroto. Además de ser más rápido, es un procedimiento mucho más superficial. sin embargo,en las gatas la cirugía es más invasiva porque se necesita llegar al útero y a los ovarios. Para ello se realiza un corte más profundo a la altura del vientre. Cabe mencionar que, aun así, ambas deberán llevar ropa quirúrgica para gatas o collar isabelino para evitar posibles accidentes en las regiones de los puntos.

Entre los beneficios de la castración en las hembras, disminuye el riesgo de infecciones y de cáncer de mama y útero. En los machos, la posibilidad de cáncer de próstata también es baja. Pero, en un contexto general, las mascotas se vuelven menos agresivas y la necesidad de marcar territorio se debilita. Para quienes tienen más de un felino en casa, esto puede generar menos conflictos.