En un episodio de ictus canino, los síntomas son similares a los de los humanos, e igual de peligrosos. El ictus se produce cuando se altera o interrumpe el flujo sanguíneo al cerebro, lo que provoca una falta de oxígeno y una serie de síntomas. Los signos pueden comenzar de forma discreta y repetirse hasta que se vuelven más graves y notorios, debilitando al animalPara ayudarte, Patas da Casa ha recopilado los síntomas más comunes del ictus en perros para que los tengas en cuenta. Echa un vistazo al siguiente artículo.

¿Qué es el ictus en los perros?

El ictus se caracteriza por problemas en el flujo sanguíneo en alguna parte del cuerpo, que se ha interrumpido o alterado y dificulta la llegada de oxígeno y nutrientes al cerebro. Las causas van desde émbolos de bacterias o grasa, hasta coágulos sanguíneos y hemorragias que causan daños en los vasos sanguíneos encargados de irrigar el cerebro.Suele estar relacionado con algún problema preexistente, como:

• Diabetes canina
• Hipertensión
• Enfermedad renal en perros
• Hiperadrenocorticismo
• Cardiopatías en perros
• Cáncer en perros
• Hipotiroidismo en perros
• Enfermedades transmitidas por garrapatas

1) Accidente cerebrovascular en perros: los síntomas van desde movimientos involuntarios a parálisis parcial

Cómo identificar un derrame cerebral en un perro no es muy difícil. Los síntomas clásicos son que el perro camine en círculos o que presente una parálisis parcial. Otro signo común es el nistagmo, que es cuando el perro presenta un movimiento involuntario de los ojos. También puede sufrir pérdida de movimiento y letargo.

2) El derrame en el perro provoca confusión mental y agresividad

También es muy común que un perro con un ictus tenga confusión mental y en esos momentos empiezan a perseguirse la cola, no entienden tus llamadas y permanecen despiertos durante largos periodos en una misma posición. También pierden los reflejos y pueden mostrarse agresivos al tacto. Que los perros presionen la cabeza contra la pared es otro signo recurrente de ictus en perros.

3) La apatía, el desmayo y la cojera son algunos de los síntomas del ictus en perros

Un perro que está quieto y no come nunca es buena señal, y éste no es diferente. Algunos perros con derrames cerebrales también muestran apatía, desgana y falta de apetito. Lógicamente, esto desencadena otros problemas, como vómitos y, en casos más graves, desmayos.

4) En el caso de los accidentes cerebrovasculares en perros, son frecuentes síntomas como la dificultad para mantener el equilibrio y las caídas.

Estos son los síntomas más graves y los que más preocupan a los guardianes. Aquí es imposible no darse cuenta de que algo va mal, porque un perro con dificultades para mantener el equilibrio es un signo muy grave. En esta fase suele tener la cabeza inclinada hacia un lado. Y los perros que no pueden caminar correctamente también sufren caídas y lesiones.

5) El derrame en un perro también provoca la pérdida de control de la orina y las heces

La confusión mental se produce de varias formas y, además del comportamiento inadecuado y la falta de memoria, el perro con ictus también pierde el control de la orina y las heces. Se trata de un síntoma complicado, ya que es difícil para él que no entienda lo que está ocurriendo. En estos momentos, es fundamental que el tutor mantenga la calma y siga el tratamiento.

6) En la apoplejía canina también pueden aparecer síntomas convulsivos

Una convulsión en un perro también es un signo de ataque, por lo que: babear, temblar, tener las piernas rígidas y orinar tumbado son signos de convulsión que conviene tener en cuenta.

7) El ictus en perros, cuando es grave, puede provocar la pérdida de visión.

Una secuela preocupante del ictus en los perros es la pérdida repentina de visión. Comienza de forma silenciosa, con el perro chocando contra los muebles y mostrando cambios de comportamiento. A continuación se producen los cambios en la visión, que se vuelve ligeramente blanquecina. La buena noticia es que si el cuidador busca tratamiento rápidamente, es posible revertir la condición de ceguera en los perros.

Los síntomas del ictus en perros se confunden con otras enfermedades

Los síntomas varían y se confunden fácilmente con otras enfermedades, como la Laberintitis en perros, la Hepatitis Infecciosa Canina e incluso el Tumor Cerebral. Para resolver posibles dudas y buscar el tratamiento correcto, lo ideal es siempre buscar ayuda veterinaria ante los síntomas. Análisis de sangre y orina, así como resonancia magnética, tomografía computarizada, radiografía para descartar otras enfermedades.enfermedades, se solicita electrocardiograma y ecografía transcraneal para cerrar el diagnóstico.

Tratamiento del ictus en perros: los síntomas muestran la raíz del problema

Una vez realizado el diagnóstico de ictus canino, el animal es hospitalizado y monitorizado, sometiéndose a tratamiento para prevenir nuevos episodios. En esta fase, se mantiene la glucosa en sangre, se administran anticonvulsivos y, en los casos más graves, se ofrece oxígeno. La medicación también incluye antiinflamatorios y vitaminas del grupo B.

El tratamiento depende de la causa del ictus y tiene como objetivo tratar el problema para detener nuevos ictus. Así, si el motivo del ictus es una enfermedad cardiaca, renal o tiroidea, se intensifica la terapia para estas patologías. La mejoría del perro también depende del grado de la enfermedad de raíz y, en casos de secuelas, se recomienda fisioterapia para perros.

Prevención del ictus en perros: los síntomas dejan secuelas

Cualquier raza de perro puede sufrir un ictus, desde el Pastor Alemán hasta el Vira-Lata, por lo que es importante prevenir el ictus en perros. Cuidar las enfermedades subyacentes es fundamental, por lo que si el perro sufre hipertensión o diabetes, hay que prestar especial atención. Sin embargo, también son frecuentes los casos de ictus por intoxicación de algunos productos de limpieza (con altas concentraciones de ácido sulfúrico, amoníaco, sodio y cloro), que debenEsté atento a las plantas tóxicas para los perros y sepa que la comida prohibida para perros también puede desencadenar un episodio de derrame cerebral por intoxicación, así que ¡manténgase alerta!